Lex

Hay un deber que se nos impone a todos: vivir intensamente, con conciencia de estar haciéndolo, vivir con belleza, pundonor y calma. Vivir esta vida rara y hermosa.

Madrugada

Hambre de más día, hambre de más vida. Apertura de las horas. Hambre del día que está a las puertas, de sus instantes. Plenitud del tiempo, que se detiene y se abre. Alta madrugada, con el día hermosamente vencido.

Espía

No sé qué busco en las tardes en la calle, cuando ya no es de día y aún no es de noche. Estar en la calle. Sentir el olor del aire, que es tan sutil en el invierno, anunciando cada día los meses próximos en vaharadas de calidez escondida. Quizás, el asombro de lo que se repite y varía, buscar la novedad en lo inalterable: cielo, tarde, noche, vida, fugacidad y permanencia.

Chris Rea

Recuerdo que aquella fue una primavera especialmente benéfica. Tu vivir me decía que era ahora el presente, el momento, que esa certeza incluía un futuro templado, un Sur, tardes miríficas. Recuerdo el sol invadiendo tu casa con una delicadeza brutal. Yo me dejaba vivir. Recuerdo que sentía aquel año como un tiempo memorable, porque tu, tu vida, me había devuelto a la vida.

Scarlatti

Intrascendencia, banalidad, ligereza y hondura, vueltas y revueltas, repeticiones sin fin, círculos perfectos, pequeñez, alegría: en suma, la vida.

África

La carnalidad de esta luz es elocuente: cada minuto de cada vida, cualquier hora de vida, todos los hombres y todos los instantes son un milagro, una razón en sí mismos, vida de más, únicas y preciosas realidades tangibles. Verdades de vida.

Feria

Hay una luz distinta. La calle inquieta y serena contempla el bullir de la gente que entra y vive en todas direcciones. Hay una sensación de orfandad al haber perdido un tiempo de fiesta y entrar en la pura vida, pera hay ya una luz distinta y el tiempo nos salva del tiempo.

Granada II

Ciudad de la vida: me hiciste apurar el cáliz hasta las heces, me vapuleaste, recorrí innumerables veces tu laberinto, siempre con un talismán en la mano.

Lugar de la vida. Lugar del agua.

(3/Enero, 21:45)

Oriente

En la librería, un señor de mediana edad, padre o tío, compra esta noche cuatro tebeos de Tintín. Pide dos paquetes y entrega dos billetes de diez euros a la dependienta, para que los esconda entre las páginas de los libros, antes de envolverlos. La librería tiene historia para mi, porque asistí a su nacimiento. En la calle pasa una cabalgata pueblerina y fea. Los libros de Hergé, esas páginas llenas de colores tenues, japonerías, salakofs y pantalones bombachos: siento la emoción estética que los niños sentirán cuando rasgen el papel y encuentren los tebeos, fue la que yo sentí ante esos mundos raros de papel.

El mundo, la vida, la realidad tienen sus magias pequeñas.

Mos et frugalitas

Si olvidamos la vida, decidiendo que las horas son palancas y tiempo para hacer, olvidándonos, la vida se abre. Si costumbre y moderación, casi rutina y pocas cosas, son nuestro avatar cotidiano, entonces estamos salvados.

Mediodía. Año Nuevo

Casi las doce del mediodía en la costa. Un sol tranquilo baña las cosas. Todo es luz. Al sentir su templanza en el jardín, sobre la piel, sentimos que es toda la filosofía, el camino, la verdad entera.